REVISTA BUILDERS
EDICIÓN #3
MENÚ
Suscríbete
ENTREVISTA
Derribando mitos de la innovación tecnológica
Share this article
"El destino no existe. Solo existen las tendencias de nuestras propias elecciones. De esta forma, cuidemos nuestras tendencias tecnológicas, así pues controlaremos nuestro destino tecnológico."
Gerardo Couso es un investigador uruguayo del área de las tecnologías de la información. Inició su profesión hace 33 años, cursando la carrera de Analista de Sistemas en la Universidad ORT Uruguay. Años después, realizó estudios de Software Engineering de forma remota y desde entonces ha sido protagonista en el desarrollo de múltiples proyectos privados de Ingeniería del Software, Base de Datos, Inteligencia Artificial, Sistemas Embebidos y Audio Digital Profesional.
En su carácter de investigador, es un referente activo en la comunidad internacional del Open Source, para la implementación de buenas prácticas de programación y seguridad de la información. Aunque nunca ha participado en eventos mediáticos sobre tecnología, siempre ha preferido la interacción directa con diversos grupos de profesionales expertos y académicos. En esta nota, intentaremos analizar en profundidad la realidad de la innovación tecnológica, desde una nueva perspectiva académica.
¿Cómo encuentras el desarrollo de las tecnologías de la información actualmente? Todos ya sabemos que el desarrollo ha sido increíble, y que la demanda de profesionales es cada vez mayor. Aún así, hay varios factores claves de competitividad tecnológica, que se están descuidando mucho en países como el nuestro.
¿Cuáles serían esos factores de competitividad tecnológica? Antes de enumerar cualquier factor competitivo en cuestión, debería mencionar que un gran porcentaje del desarrollo de Software mundial, está basado en la utilización de entornos de trabajo en la nube de origen corporativo (Cloud Frameworks). Esto trae en consecuencia, la dependencia tecnológica total de nuestros propios desarrollos con recursos de terceros, que no ofrecen garantías respecto a su seguridad operacional. En mi opinión, sería necesario atender mucho más el "desarrollo tecnológico sustentable" (Investigación, Desarrollo e Innovación), y apoyar con más sensatez la "innovación legítima" de grupos emprendedores locales.
Gerardo Couso, Investigador
"El hecho de que nuestros desarrolladores sean técnicamente 'usuarios' de plataformas corporativas en la nube, me parece bastante peligroso"
Si la gente se alarma solo por la caída temporal de algunas redes sociales, como ser Facebook o WhatsApp, imaginemos lo que pasaría con la caída parcial o total a nivel de infraestructura digital global por causas impredecibles o incontrolables.
¿De qué forma nuestro desarrollo tecnológico sería sustentable? Existen países en el mundo que han tomado el camino difícil pero seguro, minimizando dependencias tecnológicas a través de la creación de "Software de Base" propio. En esta lista encontramos Sistemas Operativos, Sistemas de Base de Datos, Sistemas de Inteligencia Artificial, Microservicios de Sistemas Expertos, Sistemas Embebidos, Controladores de Dispositivos, e incluso Lenguajes de Programación para aplicaciones especiales. En varios países europeos, este proceso se ha iniciado de forma democrática, con una integración académico-empresarial para la gestión de la investigación científica aplicada a las necesidades de la comunidad. El mejor ejemplo que se me ocurre es el Instituto de Ciencias de la Computación en Suiza (University of Bern), pero también existen otros países (Suecia, Francia, Bélgica, Holanda, Italia, España, Portugal, etc) que mantienen un excelente nivel en sus investigaciones académicas en ciencia de datos, en camino a la sustentabilidad tecnológica.
"Cuando no atendemos en profundidad el desarrollo de estos elementos claves, estamos aceptando implícitamente nuestra dependencia tecnológica de terceros, aunque muchos técnicos no reconozcan esto como un problema latente de seguridad informática".
¿Cuál es exactamente el factor técnico que ha creado las dependencias que mencionas? Los factores han sido diversos, y los mismos se han desplegado silenciosamente de forma sistemática a lo largo de la historia informática. En mi opinión técnica, creo que el verdadero origen de las dependencias fue la aparición de la tecnología OOP (Object Oriented Programming) en los años 90. Una tecnología prometedora, que lentamente fue generando dependencias de recursos de terceros, además de reducir el nivel de control de los programadores "usuarios" de tales recursos. Hoy en día, sabemos que es absolutamente necesaria, pero debemos asumir que esta tecnología puede generar adicción en una infinidad de casos para la implementación de aplicaciones. En resumen, existen tres grupos de desarrolladores de Software bien diferenciados en el ecosistema de entornos de trabajo (Frameworks): 1) Los creadores de Frameworks que utilizan lenguajes de programación de bajo nivel para la creación de infraestructuras en la nube. 2) Los operadores de Frameworks que utilizan herramientas de ingeniería para la administración de infraestructuras en la nube. 3) Los usuarios de Frameworks que utilizan lenguajes de programación de alto nivel para la implementación de sus aplicaciones. En realidad, para ser más precisos, deberíamos clasificarlos en más grupos, pero básicamente son estos tres principales. Lo más importante es comprender, claramente, que el tercer grupo es el más grande de todos los grupos de desarrolladores existentes.
En cuanto al rol del estado, desde muchos sectores se habla de que su apoyo para la innovación tecnológica es insuficiente, ¿esto es así? Si, es insuficiente a causa de una confusión muy arraigada. Existe una trampa semántica en la famosa frase "Innovación Tecnológica", que siempre estamos acostumbrados a escuchar. Como dije antes, la innovación debería ser legítima. Por el contrario, sería una falsa innovación sin mérito ni sustento alguno. Cuando hablamos de innovación, solo por implementar aplicaciones con una tecnología de terceros, entonces estamos bastante equivocados y autoengañados por creer ser tan "innovadores". En mi opinión, esto es un asunto de notoria gravedad en la medida que no se tome conciencia de la situación real existente. Dicho de otro modo, se debería incentivar mucho más la creación de emprendimientos que manejen el modelo de productividad I+D+I (Investigación, Desarrollo, e Innovación), como lo es claramente la empresa uruguaya "CCC Medical Devices". Dicha empresa es un vivo ejemplo de Innovación Tecnológica Legítima.
¿Qué deberían hacer los empresarios con respecto a este tema? Muchos piensan que simplemente vivimos en un mercado de consumo, donde innovar es sinónimo de "implementar primero las tecnologías que otros producen". Muchos piensan que "la productividad tecnológica se basa en producir más rápido y más fácil, para ganar más dinero por cada desarrollo informático". En mi opinión personal, creo que pensar así es sinónimo de pobreza intelectual. Tales prácticas serán como siempre "Pan para hoy, y hambre para mañana". Cuando se confunde el desarrollo tecnológico real con la simple implementación de recursos tecnológicos, estamos en un grave problema de difícil solución. En consecuencia, recomiendo que los empresarios deberían "pensar más en la estabilidad de sus propios desarrollos, que en generar más oportunidades de negocios con recursos volátiles de terceros". Para ello, es preciso aplicar el modelo de productividad I+D+I (Investigación, Desarrollo, e Innovación) con mucha paciencia, disciplina y creatividad.
"En definitiva, debemos cuidar mucho nuestras 'tendencias tecnológicas', para poder controlar nuestro destino tecnológico de una forma absolutamente consciente y segura".
¿Qué le dirías a quienes piensan que el éxito se basa en seguir las tendencias tecnológicas globales? Primero, antes que nada, debería comprender su ignorancia inducida por la desinformación mediática relacionada a estos temas. Luego, debería ser capaz de transmitirles mi experiencia al respecto, con todos los argumentos lógicos que expuse anteriormente. Seguramente, les diría que la independencia tecnológica no es una falacia, sino que podría ser la única posibilidad de tener éxito real en sobrevivir de aquí al futuro. Pues, la verdadera seguridad de la información no se trata de "lograr descubrir vulnerabilidades en recursos de terceros", sino que se trata de "lograr descubrir las potenciales luces y sombras de nuestros propios recursos".